Al final, al principio.

Se acabó el año, agur, no pasa nada, empieza otro, adelante, hasta la cocina, esto es lo que hay, estamos los que estamos, para cambiarlo, para mejorarlo, o no, dependerá de nosotros, (…al final todo saldrá bien, y si no sale bien es que no es el final…)  mirar para atrás sirve para aprender, a olvidar, a entender que debemos hacer todo aquello que no hicimos, a creer en nuestro impulso,  a llegar a ser lo que somos, (…la vida es como una ola. Si te resistes, te derriba; si te zambulles, te lleva al otro lado...), mirar hacia adelante sirve para saber que el futuro no existe, solo hay ahora (…el éxito se mide en cómo afrontamos la decepción, ya que siempre llega…), somos mucho, y muchos, bastante parecidos, no se me haga usted el especial, casi todos queremos lo mismo, a por ello, el no ya lo llevamos, (…la vida debe verse como un privilegio y no como un derecho…), en estos días me da sensible, espero que en todos, emocionándome con una canción, una mirada, una voz, unas lágrimas, unas risas, viendo amanecer, un lujo muy barato y diario (…cuando uno se adapta, ¡cuántas riquezas tiene a su alcance!...), ya está, este año me propongo disfrutar más de la Naturaleza (..he visto la cima de la montaña y me ha gustado...) y por supuesto de todos los que en ella vivimos, allí y aquí os espero. Para empezar bien os abrazo con todo mi corazón.

Las frases entre paréntesis pertenecen a Exótico Hotel Marigold de Deborah Moggac 

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